Están por ahí, acumulando polvo e impaciencia: A barlovento de Banks. Del mismo también está El Algebraista; de Reynolds tengo el Abismo de la absolución; de Peter Hamilton, La estrella de Pandora; Orcos, de Stan Nicholls; El imperio final, de Brandon Sanderson, con lo puñetero que resulta el inicio de una tetralogía, cosa que ocurre con el de Hamilton, solo que en esta caso es menos grave, tan solo son dos. Y aunque la esperas para concluir las historias me saben a patada en los mismísimos, casi prefiero tenerlos todos juntos y zampármelos de golpe. Y se me quedan en el tintero, pero es que son muuchos...Todos ellos prometen aunque a veces también te la meten. Algunos de ellos alcanzan precios sustanciosos. Casi todos están insertos en líneas narrativas más amplias que debes conocer para erigirte en Maestro del Contexto e Intérprete Supremo de las Alusiones. Todos soslayan la realidad cotidiana para meterte en algún mundo de Oz, con todo el entusiasmo y felicidad por tu parte. Algunos de ellos son crudamente tecnófilos o especulativos.
Cuando pienso que me los leeré me entra vértigo ocular. Ignoro si tendré bastantes píxeles visuales en mi córtex para ponerles color y relieve, así como espacio de memoria para personajes y situaciones. Y si las tramas no me superarán, ya sea por incompetencia mía o del narrador. Con el precio que tienen espero que no sea por lo último.
Ah, y también están dos clásicos que no había leido y he pillado de saldo: Alas nocturnas y El rebaño ciego, de Silverberg y Brunner, respectívamente, por aquello de mantener el contacto con los orígenes. Alguna de vampirillos, por aquello de la adicción al mordisquito
Por no mencionar los ensayos de ciencias, geopolíticas y demás hierbas ladrilleras. La cuestión es que no sé bien cual abordar por exceso de oferta, que mi casa ya parece la librería municipal.
Un saludín empalagado.
10 comentarios:
¬_¬*
Eso, a presumir se ha dicho, y a mí que me dé algo de la envidia. ¡Pedazo pila te cargas! Uno de estos días, y sólo por no sentirme mal, juntaré en un solo sitio todo lo que tengo pendiente, a ver si mi pila resulta al menos la mitad de impresionante que la tuya. u_u
maldita pila... lo peor es que por más que leas, sigue aumentando
Saludos!!! Iain Banks nunca decepciona (A Barlovento me lo leí hace unos meses y El Algebrista está en mi pila) pero el que me gustó de manera sorprendente fue El Imperio Final, no sé si has leído el anterior de Sanderson, Elantris, pero El Imperio... lo supera...
No voy ha enumerar los libros de mi pila personal (porque son un montón y por mucho que lea, sigo comprando y la pila nunca decrece) pero El Terror de Simmons y Luz Robada de Gibbons serán los siguientes que me lea sin lugar a dudas...
Un saludo desde La Tierra Media!!!
:)
A mi es que Elantris no me entusiamó especialmente y la verdad es que no me he interesando por El imperio final. ¿De verdad es mucho mejor?
De Reynolds tengo por empezar inminentemente el tercero de la serie, pero me da muuucha pereza, proque aunque los otros me entretuvieron tampoco lo suficiente como para no afrontar el tochaco con pereza, juas.
Hace tiempo que carezco de pila alguna,me leo cansinamente lo que compro.
Por cierto Errantus, gracias a tu comentario de la serie de vampioros esa me he ahorrado el tener que verla, juas juas juas. Me has quitado las ganas en un segundo!!!
Salud!
Bueno, Knut, no sabes cómo me habría gustado que alguien me pusiese sobre aviso de los libros. 3 € cada uno, no fue mucho, pero pude comprar otra cosa mucho mejor. Me los leí en el vuelo de regreso a casa, y cada 2 o 3 horas los acababa botando. Una rubia tetazas con poderes psiquicos que se acuesta con el vampiro guaperas y se enreda con otros vampiros para hacer investigaciones detectivescas mientras se arma un triángulo y el jefe vampiro se la quiere tirar. Para colmo, el jefe del café donde trabaja de camarera es un hombre lobo y a ratos también se la quiere tirar. Eso si, mucho romanticismo y soft porno, además de mordisquitos y culbrón de por medio. NO MAS, gracias, con los dos libritos tuve suficiente.
Por Dios!!!! De nuevo te reitero las gracias, tenía bajado los primeros 4 episodios a falta de descubrir los codecs que me faltaban para verla. Qué alegría tontorrona ha sido el librar el disco duro de 5 gigas.
Gracias, gracias... y los libros ni tocarlos, que ultimamente estoy muy sensible...
Elantris acaba perdiendo fuelle, lo que pasa que las críticas de El imperio final eran atractivas, pero claro, nos ha jodido, eso es lo que pasa siempre, je, je. En fin, ahora ya está comprado, no se puede hacer nada. El Imperio, por contra, tiene el problemilla de que es una serie y da miedo empezarlo y que la corten. Aunque NOVA no hara eso ¿no?
No, francissco, NOVA son incapaces de hacer algo así a sus lectores, el mercado librero en nuestro idioma nos respeta bastante... XD
Knut, ¿conoces HEX? Una serie de la BBC tipo Buffy pero con mucho más morbo y humor inglés. Esa si la seguía yo con atención, aunque iba de demonios, fantasmas y demás. A mí me encantaba la lesbiana fantasma, hacía cada barbaridad... XD
La desconocía por completo, aunque si soy sincero Buffy me pone un poco nervioso. Aunque no niego su inmenso valor físico, el personaje en sí me resulta insoportable, especialmente la tendencia a mantener pseudotrascendentales charlitas con antiguos amigos devenidos en vampiros y demás... Pero dado que aquí hay lesbianas vampiras es muy probable que me la eche al gaznate.
Me doy cuenta que dos de las cosas que más me gustan en esto, los vampiros y los zombies, no están particularmente dotados con historias que realmente merezcan la pena, lo cual me lleva a preguntarme el por qué diablos me gustan.
Por cierto, impagable la serie inglesa sobre un gran hermano al que le pilla un holocausto zombie, o el corto de los zombies judios, juas juas juas Casi te resarce de todo XD
No, no, vampira no, fantasma. Se mete a una morgue para cambiar de ropa, ya que sólo puede usar ropa de muertos, y de paso aprovecha para darse un gustito con el cadaver de una chica de muy buen ver. XD
Eso de los zombies lo has visto ¿dónde? Suena muy interesante.
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