miércoles, 12 de noviembre de 2008

Obama y el cetro del azar


Será un cambio, claro que lo será, pero no seamos tan ingenuos, que ya somos mayorcitos. Ser presi de los USA no es como una novela de CF que leí, El cetro del Azar, donde el personaje, Ingmar Langdon, era elegido el Estocastócrata, el mandamás del mundo, así por el morro, mediante un sistema estocástico, osease por sorteo.

En esa sociedad futura, encantadoramente añeja, con el poder conseguido podía hacer lo que quisiera, lo que le viniera en gana. Luego había intrigas, conjuras y demás, pero esa era la esencia.

En yanquilandia no, claro. Ya ha tenido el Barack sus primeras reuniones con gente de la Inteligencia militar, expresión que según Groucho Marx era una contraditio in terminis, por decirlo de forma piadosa. Le han puesto las peras a cuarto: en Guantánamo hay gente mala, pero mala de verdad y su liberación es una vana promesa para tontos buenistas.

Si se van de Irak habrá que hacerlo a cambio de machacar Afganistán. Y eso solo es el principio.

Pero hay algo que permanecerá por siempre: esa expresión y sentimiento de éxtasis en los votantes, cuando ven a una pareja presidencial tan resultona, producto de un márketing casi perfecto. Es un triunfo de la mercadotecnia, de la cultura de la imagen, del perfeccionamiento de los envoltorios. A ver que pasa.

3 comentarios:

Errantus dijo...

Como dijese algun presidente de USA en su momento: USA no tiene amigos, tiene socios comerciales.

Asì que tampoco es para esperar cambios radicales, que los cambios que se hagan seràn al interior de USA y en beneficio de(algunos de)sus ciudadanos.

A mì lo que me sorprende es la ingenuidad de mucha gente alrededor del mundo que piensa que el señor serà el mesìas que vendrà a salvar al planeta, cuando a duras penas podrà arreglar las cosas para sus ciudadanos.

Knut dijo...

Es lo malo de esto, de alguna manera caerás en una trampa nada más te metas. O bien Obama es chachipilongui y nos llenará de esperanzas o caemos en el habitual pesimismo al que nos ha condenado la realidad.

Me inquieta con todo la aceleración que estamos dandole a todo, como si cada año debiera traer algún tipo de Apoteósica Novedad. Que si Refundamos el Capitalismo, que si el Arte, la Filosofía, la Historia y la Verdad se han muerto. En fin, que aunque todo seguirá más o menos mal como siempre, los que tengamos razón seremos tachados de nihilistas, de negativistas y en general de todo lo demás.

Yo quiero a Aznar como presidente del Real Madrid, a fin de desplazar todo mi odio general hacia el Todo para algo productivo.

No se trata de que el refresco sea coca-cola o fanta, sino de que son en el fondo refrescos. Sólo sirven para el matar el mal sabor del alcohol.

Saludos!!!!

Errantus dijo...

Hey, Knut, que si vamos a ser pesimistas, serlo a tope, no dejarnos las cosas a medias.

"No se trata de que el refresco sea coca-cola o fanta, sino de que son en el fondo refrescos. Sólo sirven para el matar el mal sabor del alcohol."

Que te has dejado fuera lo de llenarnos de gas, picarnos las muelas y aportar un montòn de calorìas inservibles. ;-)