martes, 13 de noviembre de 2007

Manifiesto de vida


Pues eso, que aunque lleve una porrillada de días in absentia no estoy aún con el rigor mortis, sigo vivito y coleando, pero permanezco tan poquito tiempo en casa en estos días que no hay manera de pillar el pc con tranquilidad. No soy el peor; anda algún otro por ahí que a la hora de actualizar el blog es más vago que la chaqueta de un guardia, y no quiero mirar a nadie, je, je...

Un abrazo cariñosete, empalagoso y comprometedor, pues, para tod@s los que me han leido alguna vez. En breve plazo volveré a subir entraditas por aquí, caracterizadas por la escasa voluntad de rigor habitual, así como las mismas ganas de oscurecer y confundir al personal.

Besotes.

Pd: Envío la foto de un bosque. Por el pueblo en el que estoy no hay otra cosa. Se me va a hacer cara de hobbit...