viernes, 16 de enero de 2009

Soñando en el Fevre

El Sueño del Fevre es un vapor típico de los ríos Missisipi, Missouri y demás. Si existiera y viajaras con un billete normal tendrías un viaje con no más problemas de los derivados de la calidad de tu camarote y de la infraestructura material de aquella época. Pero si el billete te lo proporciona George R.r. Martin las cosas se pueden complicar bastante.

Porque mira que a quien se le ocurre meter vampiros en un viaje tan largo, que ya es mala idea. Encima no solo están por el buque sino por todas las riberas de esos ríos caudalosos, por esa Nueva Orleans alumbrada por lámparas de gas, tan rococó, tan llena de esclavos y de una humanidad mixta, producto de apareamientos entre esclavistas, negros y mestizos en diversos grados.
Si tiene que haber vampiros tiene que ser ahí y no en Transilvania. Tiene que ser en esa ciudad edificada encima de manglares que siglo y pico más tarde de los acontecimientos narrados arrasará el Katrina. Porque son la miasma y el pantano, la ribera y los enormes y oscuros ríos lo propio del vampiro, en mayor medida que los Cárpatos y otros lugares con solera acreditada.

En esta ocasión vuelvo al mismo vicio irresponsable de siempre, escribir sobre un libro que todavía llevo a mitad y merecería por ello los castigos vampíricos que aplica Martin. Pero por eso le pongo el (1), porque volveré. Porque a pesar de haber pillado la edición de Acervo (cualquiera espera a Gigamesh sacándola en el 2020) con erratas que irritan, te das cuenta de que Martin en 1982 ya le daba la inspiración a la Anne Rice dichosa, a esa copiona de ambientaciones y estilos.
Espero que no defraude el manejo de la historia. Si consigo bajar del barco proseguiré. De momento hemos atracado ahí, en Nueva Orleans...

6 comentarios:

Knut dijo...

Es un clásico que está la mar de bien, peeeeero si te soy sincero a mi me supo a poco en su momento. Pero claro si me lo compara con cualquier novela de Lestat El Guapo Que Visita A Dios (lo admito, en esa novela ya sencillamente no pude más) entonces no hay nada que decir.

Te recomiendo vivamente La Momia, de la Rice, nunca ese "dignísimo monstro" ha portado tanta vena. Y sí, exactamente ahí donde piensas, no del tipo de vena de sus vampiros, no Señor. Estas son concretas, abultadas y vivamente palotianas. Sueño ocasionalmente con que su Cleopatra me viola.

Errantus dijo...

Pues me tendré que pescar "El sueño del Fevre", a ver el antecedente de la Rice y la Z. Brite, pues las dos hablan de vampiros en Nueva Orleans.

¿Sabes Knut? Yo con "La Momia" ya me sentí defraudada, era el mismo relato de la Rice con otro personaje. Igual que su "Sirviente de los Huesos" y Lestat Superstar. Se me ocurrió comprar su libro de los "Santos Inocentes" y cuando pasó el capítulo I, mejor regalé el libro y pasé por completo de la Rice.

Esto de los vampiros empieza a ser cansino, me habían empezado a animar con la serie "True Blood", hasta que me enteré que se basa en los libros de Charlaine Harris, y realmente me desanimé, pues acabé harta de su historia. Dos libros que me compré sin referentes, me los leí y dije no más.

Anónimo dijo...

A mi me gustó bastante en su momento, y tengo la relectura pendiente de que Gigamesh la reedite con nueva traducción. Aunque fue Martin el que se basó en la Rice. "Entrevista con el vampiro", la única novela de Rice que he leído, es de unos años antes... Pero mejora el original. Bastante.

francissco dijo...

Sí, je, je, la Rice es anterior, voy a darme una colleja por la coladura.

Errantus dijo...

¿En serio? No me puedo creer que esa mujer tuviera la iniciativa. Con eso de que se la pasa autoplagiándose... O, bueno, por lo menos digamos que escribe una y otra y otra vez la misma historia. ¿Será que quiere ver si logra perfeccionarla? :-m

Knut dijo...

Juas juas juas. Confieso que es algo que sé desde hace ya muuucho tiempo pero que tiendo a olvidar con una facilidad sospechosa. Ya en cyberdark recuerdo un hilo en donde ocurría lo mismo y también Nacho (o quizás Anraman, hmmm) nos ponía en su sitio.

Con todo debo decir que los tres primeros libros de Rice me gustaron en su momento bastante. Reconozco que el primero es el mejor con diferencia (de todo lo que he leído de ella), pero que a mi los que me gustan realmente son los dos siguientes. Esa mezcla de vampiros y Dragon Ball para mi fue un gustazo. Es el resto lo que detesto, incluyendo la serie pseudopornocita de las brujas y demás.

Es algo así como lo que hizo las Nieblas de Avalon con el ciclo artúrico, pero en peor.

Y ya, como colofón de la vergüenza, prefiero mil veces a Rice que a Poppy Z. Brite, aunque no niego que esta ha conseguido ponerme cachondete con escenas homosexuales, pero es que tuve una adolescencia rodeada de "siniestros" y creo que soy alérgico a toda esa parafernalia nihilista/existencialista tachonada de cuerecito y semen dulce.

Salud!